El festival invernal de Barcelona se consolida con una programación diversa y llenos absolutos en más de la mitad de sus conciertos
El Cruïlla Hivern ha concluido con un éxito rotundo su segunda edición, consolidándose como una de las propuestas culturales más destacadas del invierno barcelonés. Con 31.115 asistentes y 7 conciertos con entradas agotadas, el ciclo ha demostrado su fuerza en la escena musical.
Desde el 11 de enero hasta el 15 de marzo, el festival ha programado 13 conciertos en 5 salas de Barcelona, presentando una diversidad de artistas locales e internacionales que han hecho vibrar a miles de espectadores.
El ciclo arrancó con la argentina Maria Becerra, que hizo cantar a un Sant Jordi Club repleto. Posteriormente, Depedro y Flashy Ice Cream protagonizaron una noche especial con dos conciertos simultáneos en diferentes salas. La Habitación Roja y Hard GZ también dejaron huella en enero, al igual que Sidonie, que agotó entradas en dos ocasiones.
Dani Fernández y Shinova continuaron la senda de los llenos absolutos con espectáculos inolvidables, mientras que Besmaya hizo temblar La Paloma con su energía arrolladora. Skunk Anansie y Trueno fueron los encargados de encender la recta final, con el rapero argentino compartiendo escenario con Bad Gyal en un momento histórico. Finalmente, Sexy Zebras puso el broche de oro con un cierre lleno de rock y pasión.
Con la vista puesta en el Festival Cruïlla, que se celebrará del 9 al 12 de julio, la organización ya trabaja en la próxima edición del Cruïlla Hivern, que promete seguir creciendo y ofreciendo música en directo de primer nivel.