Charlamos un rato con Agoney, quien hace poco más de diez días sacó su primer álbum, Libertad. Hablamos sobre el proceso del disco, el significado de algunas canciones, sus firmas de discos y más.
¡Buenos días Agoney! ¿cómo estás?
¡Buenos días! Muy bien, muy contento de estar otra vez de promo, y feliz.
Es un placer tenerte aquí con nosotros, en El Foco. Primero de todo enhorabuena por tu discazo. Porque es un discazo de los pies a la cabeza.
¡Muchas gracias!
Es un disco de los más esperados, y hace ya 3 años de tu paso por Operación Triunfo. ¿Cómo es que has tardado tres años en sacar un disco, y no antes?
Eso mismo se preguntan mis profes de técnica vocal. Por ejemplo, cuando empecé con 14 años… Me siguen diciendo “¿cómo has tardado tanto en sacar un disco?». Desde que tenía 14 años, podía haberlo hecho.
Pues, es que la vida ha sido así de «perra» conmigo (Risas). Y me ha llevado por este camino. Pero mira, lo bonito es que al final tenemos un disco bien hecho, he hecho lo que me ha apetecido, y creo que con buen gusto. Y estoy bastante orgulloso, la verdad.
¿Cómo ha sido trabajar con Andrés Terrón, Pablo Estrella y Apollo Vice?
¡Ha sido muy guay! ¡Son tres personas maravillosas1 Son muy diferentes entre ellos, pero se compenetran súper bien.
Yo siempre recordaré las caras de todos cuando les iba presentando los temas. Era una cara de asombro, de decir, “¿cómo vamos a hacer eso?”. Cuando les enseñé Ángel Caído, por ejemplo, era una cara de “¿qué está pasando aquí?”.
Pero muy guay, nos lo pasamos muy bien. Me divertí mucho contándoles las historias de cada canción, el por qué de cada canción. Aprendí muchísimo, la verdad. ¡Aprendí la vida con ellos!
Además, este disco tiene una mezcla de pop, electrónica y unos toques barrocos. ¿Quién dio esta idea de hacer esta mezcla? ¿Cómo surgió?
Mira que guay que digas lo de los toques barrocos, porque cuando estaba en televisión y coincidí con Jaime Altozano por primera vez, se lo describí el disco como tal cual lo acabas de decir. Y lo último que dije fue “con toques barrocos”, e hizo “¿cómo?”, y creo que fue el punto que enamoró para que él dijera “quiero escuchar eso, me da curiosidad”.
Iba solo. Yo a veces también me pregunto “¿de dónde sale esta idea?”. No sé, luego me pongo a escuchar las notas de audio—porque yo lo grabo todo con las notas de audio del móvil—, y a veces incluso he pensado que son regalos. No sé, yo no soy creyente ni nada, pero a veces uno compone las canciones, y salen como si fueran regalos, de verdad. A mi me parece maravilloso que mi cerebro pueda hacer eso, o el cerebro de cualquier persona lo puede hacer, seguro. Pero el poder sentarme al piano y poder crear una melodía con tal y llevarlo a sentimientos, y que toda la instrumentación tenga un sentido… ¡Me parece tan maravilloso! ¡El ser humano es muy potente!
Además, tú mismo has dicho en entrevistas hay gente que antes no te seguía, o que no le gustabas tanto y ahora sí. ¿Qué crees que ha hecho este cambio?
¡La música! Es que no hay más. Yo creo que ahí está todo. Al final, he pasado mucho tiempo sin sacar música. Literalmente, si me siguiera a mi mismo, me hubiera dejado de seguir hace mucho tiempo, la verdad. Porque a mí me interesa la música de la gente, y soy sincero, si una persona no saca música… No es que haya sacado un disco y haya pasado mucho tiempo hasta el otro, es que directamente no he sacado música. Yo había sacado hasta ahora dos singles. Es muy poco para tanto tiempo, ¿no?
Entonces, es normal que la gente pase del rollo, pase de mí y todo esto. Y es normal que ahora al sacar un disco, con todo el concepto y con esas cosas, que a la gente le de curiosidad y lo escuche y le guste. O no, pero a los que les guste, que se queden y me lo digan.
En El Foco, a medida que has ido sacando canciones, el disco, la portada… ¡hemos ido analizándolo todo! Si que Quizás, Black y Libertad son los tres temas que ya llevan más tiempo en el mercado. Así que ahora vamos a hablar un poco del significado de las canciones restantes.
Vamos a empezar por Más, que la sacaste este año, el 19 de junio. Esta canción fue escrita en 2018, ¿por qué lleva dos años en la sombra?
Eso digo yo, ¿por qué? Más iba a ser mi primer single. Pero a una persona se le ocurrió que no era buena idea. Amo a esa persona digo, eh. Me llevo muy bien con esa persona. Tuve que trabajar mucho para convencer a mucha gente de que era capaz de sacar ese tema y de defenderlo, y de crear mi propia música. Al final iba a ser lo más correcto, ser sincero con la música y tirar para delante. Y por eso tardó tanto en salir.
Para yo llegar a este punto, he tenido que trabajar y demostrar mucho. Y no a nivel vocal, sino a nivel de trabajo, sobre todo. De que se den cuenta de que soy una persona que está aquí para trabajar, y que no tiene miedo a nada.
Esta canción se la enseñaste a Mónica Naranjo y a Mimi, Lola Índigo, que te dio algunas ideas. ¿Te gustaría hacer una colaboración con ellas?
¡Me encantaría! Mira, yo estoy en un punto en el que me encantaría compartir música. Ya he pasado por todo este trance de soledad y creando un álbum tan íntimo, personal y todo esto. Y estoy en un punto que me encantaría compartir música, claro. Con ellas, y hay muchísimos artistas con los que me gustaría compartir.
¿Se pueden venir colaboraciones próximamente?
Ojalá que sí. Me apetece, la verdad.
Más es una canción donde dices que no quedan rencores y parece que hablas de Twitter, porque dices “nunca pude imaginar que la historia era real, pájaros azules filosofeando sin parar”. ¿Esta canción va para los haters?
No, no está dedicada a los haters. Eso era porque… Lo voy a explicar, ¿vale?
Esto que leíste ahora, este fragmento, es porque una mañana me desperté y me desperté desubicado, y como si todo hubiera sido un sueño. Como si todo lo que había vivido de un talent, de que la gente me conoce y todo esto, hubiera sido mentira.
Me desperté en mi casa, como siempre, y me desperté tal cual. Me senté en la cocina, como siempre me levanto, con el olor a café… Primero me puse la tele, y cuando cogí el móvil, dije “voy a entrar a twitter, a ver qué hay aquí”. Y me chocó porque, era muy rara la sensación, era como “no me puedo creer que no haya sido un sueño, es real, he pasado por todo esto”. No sé, a mi a veces por la mañana me pasan estas cosas. Y eran esas cosas, “pájaros azules filosofeando sin parar”, era gente que no paraba de comentar de mi vida, de dónde estaba. Era una época en la que desaparecí un poco, y todo el mundo “pero donde está, no sé qué, estará haciendo no sé qué…” y era como “¿qué?”.
Era una sensación muy muy extraña, la verdad.
Ahora vamos con Edén, una canción donde te abres mucho, una historia del pasado. Y no querías que saliese. ¿Se puede explicar por qué no querías que saliese?
Sí, porque Edén era una carta. Era una carta personal, para decirme “esto que ocurrió, no volverá a pasar”. Yo sentí que era algo muy íntimo, y la melodía, y la forma de cantar… Era como, “¿por qué eso iba a ser publicado? No tiene sentido que estuviese publicado, ni la letra ni nada”. Y al final sí que tenía sentido, y todo el sentido del mundo.
¿Y cómo te convencieron para que la publicaras?
No fue tan difícil, ¿eh? (Risas). Pero saltó por error. Iba con Néstor, que justo lo tengo aquí delante. Íbamos en un avión, no me acuerdo de camino a dónde, pero estábamos escuchando maquetas y cositas que tenía en el ordenador o en el móvil, no recuerdo. Y saltó Edén, y le dije “bueno esto no, esto es algo muy personal, esto no hace falta”, y dijo “no, no, pínchalo ahí”. Y lo pinché y dijo “uf, esto mola, mola mucho”, y me empezó a animar a partir de ahí.
Ahora vamos a pasar a Soy Fuego, en la cual más que «fuego», podríamos decir que en esta canción eres «libre». Hay un verso, una parte que dices “Tanto tiempo bajo el agua, y solo por salvarme”. ¿De qué te estabas salvando? ¿De qué te estabas hundiendo?
Ay, ¡esa historia! Me estaba hundiendo en mis propias penas, me estaba hundiendo en mi propia casa, en mi propia basura… Me estaba ahogando en nada, en una mentira que yo me había creado de inseguridades, de miedo y de todo. Y había hecho una bola, y estaba viviendo dentro de ahí y me estaba ahogando sin saberlo. Y al final te das cuenta que para salir de ahí, la única forma era romper esa burbuja, y salir, y gritar.
¡Necesitaba escapar de ahí!
En Perficción, es una canción que dices que lo perfecto no existe. ¿Es por eso por lo que el nombre es «perficción» y no «perfección»?
Claro, perficción es una mezcla entre la «perfección» y la «ficción». Es cuando algo es tan perfecto, que no es real.
Yo soy un poco desconfiado, a veces. Y hubo una historia, en la que yo veía que algo era demasiado perfecto para ser real. Y al final, el tiempo me dio la razón. Esa cosa no es que no fuera perfecta, es que era una mentira totalmente, era un personaje de ficción todo. Era todo ficción. Y por eso perficción, era “madre mía, no me lo puedo creer, es todo mentira”.
Ahora pasamos a una canción que tiene muchos secretos, que es Ángel Caído. Dices que el significado solo lo dirás en La Resistencia…
Lo de La Resistencia tiene un motivo, y es Late Night. Claro, Ángel Caído es muy subida de tono, y cualquier medio me la censuraría. Entonces, esta historia solo la puedo contar en un programa nocturno. El otro día en una radio decía “chicos, yo se lo cuento, si ustedes montan un programa nocturno”. Así que, si alguien monta una radio de esas de noche, de esas de madrugada contando cosas raras, yo voy y lo cuento.
Hemos analizado un poco, y nos dices si estamos en lo cierto. En la introducción dices que en la canción se va a hablar del cuerpo, de los cambios, que está basado en el amor y en el crecimiento, y que todo es fascinante. Y la canción es más sexual, e incluso tiene gemidos. Entonces, ¿la canción habla del sexo y la virginidad y todo esto?
No, se han equivocado. Habla del sexo, pero no de la virginidad, ni mucho menos, vamos. Va por una parte más compleja. En la intro, es muy gracioso porque es todo lo contrario a la canción.
Es como todo se basa en el amor, y el amor es dios. Dios, dios, dios… Y de repente entra con “la oscuridad”. Y es como “venga, que ahora voy yo a romper todos los esquemas de eso, de que el amor es dios, y que no se puede hacer sexo sin sentir amor, y sin tener una pareja y sin casarse” no, ahí llego yo a romperlo todo.
Vamos a esperar a ese Late Night Show, a ver qué pasa…
A ver donde sale, no sé. Yo espero que alguien cree algo, para yo poder contarlo.
Además de esas canciones y Volver a ser, sabemos que hay canciones que tienes grabadas que no han salido. ¿Saldrán o se quedarán en la sombra?
Yo creo que se van a quedar ahí, en la sombra. Creo que sí. No sé, nunca se sabe. Al final, a mi la vida me ha dado muchos guantazos de decir “venga, ahora vamos a hacer lo que decías que no ibas a hacer”. Pero por ahora… sí.
Me apetece también componer otras cosas, producir otras cosas… e ir cambiando.
¿Vamos a tener merchandising?
No lo sé, la verdad. Quizás sí. Si lo piden, sí.
Has pasado por Valencia, Murcia, Granada, Málaga y Sevilla. ¿Cómo ha sido volver a firmar, pero esta vez con un disco propio?
Ha sido muy guay. Ha sido muy guay, ha sido una pasada, la verdad. Sí que es verdad que me pasaba con las firmas anteriores, que prestaba más atención a la gente, a lo que me querían decir a mi personalmente, más que al disco en si. Porque al final, yo me sentía como intruso, firmando algo que no era mío, la verdad. Era como “te hago una firmita así, pero para no enconcharte el proyecto de muchas personas, al final”. Pero esto sí, y me puedo tomar la molestia de abrirlo, de quitarle el libreto y de escribirte tu nombre, y algo bonito y…, no sé, es como algo personal. Escribírselos a las personas también de cara a cara, es como “este trabajo es mío, pero también es tuyo. Es algo de tú y yo”.
Además, has regalado rosas, ¿cómo es eso?
Eso digo yo, qué locura. Teníamos una pequeña reunión hace un tiempo, cuando estábamos preparando todo. Y a una amiga que trabaja en marketing, pero no para mi ni conmigo, para otras empresas. Me dio una idea. Me dijo, “oye, qué bonito seria ir a una firma y que te regalen una rosa”, y yo dije “bua, esto sería maravilloso. Pero ¿cómo conseguimos eso?” Y a los dos días, apareció un señor, muy amable, y me regaló 500 rosas. Muy fuerte.
Es que, al final, esas cosas hay que contarlas. Qué bonito que haya personas tan bonitas, y que se presten a esas cosas, con todo el amor del mundo y sin ningún trasfondo. Me parecía lo más tierno del mundo, al final. Lo hizo con todo su amor, con todo el empaquetamiento de cada rosa, la etiqueta… Porque encima pusimos una etiqueta con “libertad”, el significado de libertad… Creo que era algo muy bonito, y además un recuerdo para la gente; no solo que se llevaran la firma, sino también que yo les devolviera una parte de todo lo que ellos me han dado, que ha sido todo.
Para finalizar, queríamos preguntarte si hará más firmas como en Barcelona y Madrid, que son dos ciudades que la gente esperaba que fueras a firmar.
Ya, a mi me encantaría. Te juro que soy el primero que querría ir a firmar, pero con la situación que estamos viviendo, por ahora no me dejan.
Pero si por mi fuera, vamos, estaría una semana entera en una misma ciudad firmando, si hace falta.
Ahora tendremos que esperar a una gira, que esperemos que haya, y a ver si nos podemos ver pronto en entrevistas, en la gira, en una firma o cualquier cosa que surja. Muchas gracias por estar con nosotros, y esperemos que te vaya muy bien, y que nos veamos en un futuro.
Muchas gracias, que así sea. ¡Nos vemos!
Te dejamos la entrevista completa en vídeo a continuación: