Mariola Marcet, pionera en traer el movimiento ‘Upcycling’ a España, nos habla sobre cómo conoció la moda sostenible haciendo intercambios de ropa de segunda mano, para que estas prendas pudieran alargar su vida. Fue entonces cuando conoció este movimiento y años más tarde lo convirtió en su negocio: ‘Upcyclick’.
¿De dónde nació tu pasión por la moda?
Desde pequeña siempre me ha gustado la moda y le hacía vestidos a mis muñecas. Tenía una máquina de coser de la muñeca de los 80 Chabel. Aunque siempre me ha gustado y siempre ha estado ahí ,me he dedicado al diseño industrial y de interiores y no al de moda.
Como siempre he tenido esta pasión, mientras trabajaba como interiorista en un estudio, empecé a realizar intercambios de moda, cuando la ropa de segunda mano todavía estaba estigmatizada, para dar salida a todas esas prendas casi nuevas que tenemos en el armario. A partir de ahí, empecé a conocer el mundo de la moda sostenible y el consumo colaborativo.
¿Cómo conociste el ‘Upcycling’?
Cuando me empecé a interesar por la moda sostenible conocí el ‘Upcycling’ y llegó un momento en que hacer los intercambios y trabajar era incompatible y, entonces, me decanté por la moda. Estuve en un programa de aceleración de SocialNest, una fundación que ayuda a los proyectos sociales, y en 2 meses surgió ‘Upcyclick’.
Vimos la necesidad de enseñar a la gente que, con el ‘Upcycling’ se puede reinventar la ropa sin necesidad de comprar. Detectamos que la mayoría de gente que consume ‘fast fashion’ es porque le gusta cambiar de ropa contínuamente. Una manera de atraerlos es enseñarles que con la transformación y customización de prendas a través del ‘Upcycling’ también lo pueden hacer.
¿Por qué quisiste traer la ‘moda upcycling’ a España?
Creía que el ‘Upcycling’ era una manera muy interesante de reciclar toda la ropa que ya hay, que es demasiada. De hecho, para hacernos a la idea, hay un estudio que dice que si ahora se dejara de fabricar ropa podríamos vestir durante 8 años.
Por esto, la manera de dejar de fabricar ropa, pero igualmente cambiar de ropa siguiendo la moda, es optar por el ‘Upcycling’. Además, sería una manera de ayudar a las costureras o “fashion makers” y a los diseñadores, que ahora mismo lo tienen difícil porque está todo muy externalizado a las grandes empresas. Además, se ha perdido el valor por su trabajo porque la gente prefiere comprar una prenda nueva que gastar dinero en arreglar la que ya tiene.
¿Crees que en este aspecto INDITEX y los grandes grupos de moda han dañado mucho la moda actual?
Creo que sí. Para ellos la producción de ropa son números y no eran conscientes del impacto que podría causar. Además, a causa del éxito de estas grandes empresas, ha habido muchas marcas que inicialmente optaban por la calidad que ahora han copiado su modelo.
Ahora estos grandes grupos parece que se están poniendo las pilas en el tema de la sostenibilidad, pero van muy a su ritmo porque tampoco se ejerce presión desde los gobiernos. Es decir, si existieran penalizaciones por las emisiones de CO2 sí que cambiarían mucho más las cosas. Como hoy en día se contamina sin ningún perjuicio todo el proceso es más lento.
¿Podrías definir en pocas palabras cómo es la moda en la actualidad?
La primera palabra que me ha venido a la cabeza es GreenWashing, porque hay mucha gente ahora que utiliza la sostenibilidad como recurso para vender más, que a la vez es contraproducente, porque la sobreproducción no es sostenible.
La otra palabra que me viene a la cabeza es concienciación, porque sí que es verdad que hay mucho GreenWashing, pero a la vez las personas cada vez se informan más y saben diferenciar lo que es sostenible y lo que no.
Por último diría que la moda hoy en día es comodidad, porque creo que muchas marcas, después del Coronavirus, han optado por prendas más cómodas porque creen que, como la gente está mucho en casa, las prefiere.
“No necesitamos tanto volumen de prendas, es mejor tener pocas, pero de buena calidad”
¿Qué alternativas de moda sostenible hay actualmente a parte del ‘Upcycling’?
Sí que existen otras alternativas de moda sostenible, con marcas que utilizan materiales orgánicos. Por ejemplo para hacer alternativas a la piel se usa el cactus o la piel de naranja. Cada vez se está investigando más para convertir lo que serían residuos en materia prima, es decir, el principal objetivo de la economía circular.
Este concepto cada vez lo están introduciendo más empresas porque al final los recursos son finitos y la economía lineal es un sin fin de generar residuos. Y por mucho que se recicle, muchas veces se desgasta el tejido/producto o hasta se gasta más energía reciclando que sin hacerlo. Entonces con el ‘Upcycling’ se mejora el producto, es una buena opción.
¿Por qué crees que el ‘Upcy- cling’, popularmente, to-davía es desconocido?
Con el ‘Upcycling’ creo que pasa que la gente de primeras no termina de entender lo que es, pero cuando se les explica dicen que sí que consumirían este tipo de ropa. Creo que se conoce mucho más ahora que cuando empezamos aquí en España hace 4 años, pero todavía queda. En Estados Unidos sí que se conoce mucho más porque hay muchas marcas que lo hacen y, además, lo llevan las famosas.
Las prendas ‘Upcycling’ no solo pueden ser moda sostenible, sino que también pueden tener el valor de reutilizar y customizar una prenda que ha ido pasando de generación en generación, ¿qué piensas?
Justamente es esto lo que nos gustaría transmitir, la parte sentimental de la prenda y la historia que hay detrás de ella. Este es un elemento importante para que las tratemos bien y no sean de “usar y tirar”.
¿Cuál crees que es el futuro de la moda? ¿Podría ser el ‘Upcycling’?
Para mí podría ser el ‘Upcycling’, porque es una muy buena alternativa para dar una nueva oportunidad a toda la ropa ya fabricada. Pero en general, el futuro de la moda sería la moda sostenible. En definitiva, utilizar materiales que no dañen el planeta y vigilar con las cantidades. No necesitamos tanto volumen de prendas, es mejor tener pocas prendas pero de buena calidad.
Por eso también con ‘Upcyclick’, con Bianca Fuentes -estilista de ‘Upcyclick’-, hicimos una cuenta de instagram que se llama “estilismo consciente”. Tenemos el objetivo de enseñar a la gente a sacar partido a sus prendas, porque al final nos ponemos únicamente el 20% de lo que tenemos en el armario.