La famosa sitcom, protagonizada por un grupo de policías que trabajan en una comisaría de Brooklyn, dedica un episodio de la sexta temporada al movimiento reivindicativo #MeeToo
El pasado cinco de noviembre, Netflix subió a la plataforma la sexta temporada de esta serie, creada por Dan Goor y Michael Schur. Aunque fue cancelada por la cadena FOX después de su quinta temporada, NBC la rescató y ya hay en proceso una octava. Mientras esperamos que la plataforma permita ver la séptima temporada en nuestro país, tenemos disponibles 18 nuevos episodios que no llegan a la media hora. Siguiendo la tónica de sus predecesoras, podemos acompañar a este grupo tan atípico de policías durante las investigaciones de los casos mientras conocemos sus vidas y problemas.
Si hay un episodio de la sexta temporada de Brooklyn Nine-Nine que sea relevante por el tema que trata es el octavo, que lleva como título He said, She said (Mi palabra contra la tuya). Está dirigido por Stephanie Beatriz, la detective Rosa Díaz en la ficción, y tiene como tema central el #MeToo. Este movimiento surgió en las redes sociales, donde muchas mujeres denunciaron agresiones sexuales que habían sufrido. Fue una respuesta que se produjo después de conocerse las denuncias por abusos cometidos por el productor Harvey Weinstein.
He said, She said
En el capítulo se explica el caso de Keri (Briga Heelan) que denuncia un intento de abuso sexual por parte de su compañero Seth (Jonathan Chase). La investigación la lleva la pareja protagonista, el inspector Jake Peralta (Andy Samberg) y la sargento Amy Santiago (Melissa Fumero).
La empresa le ofrece a la empleada una gran cantidad de dinero por su silencio. Aunque al principio no quiere denunciar porque sabe que será su palabra contra la de él, Amy le promete que hará todo lo posible para que Seth pague por lo que ha intentado hacerle. A través de este caso, conocemos que la sargento también sufrió un intento de abuso por parte de su instructor, lo que le llevó a pedir el traslado a la comisaría 99.
El episodio termina con Keri renunciando a su trabajo porque ve que el clima ha cambiado y no se siente a gusto. A pesar de esto, afirma que no se arrepiente de haber seguido adelante con el proceso. Además, su postura provoca que una compañera quiera denunciar otro caso.
Aunque la serie es de ficción, no excluye que se nos pueda encoger el corazón en episodios como este. Los momentos en los que el drama se hace hueco en la comedia, a veces surrealista, nos golpea con la realidad en la que vivimos. En este caso trata el intento de abuso y sus consecuencias: el miedo a denunciar porque la víctima pueda ser culpabilizada, el victim blaming. Además, también se pone sobre la mesa otro aspecto, que es el de cuestionar a la víctima. Es un hecho que sucede a menudo, más aún si el denunciado ocupa alguna posición que le otorga poder.
Una octava temporada influenciada por el movimiento #BLM
Brooklyn Nine-Nine no huye de los problemas de nuestra sociedad. A través del carácter humorístico de los gags se han tratado temas como el racismo, la homofobia, el machismo, entre otros. Ahora, los guionistas se enfrentan con otro desafío: cómo tratar el movimiento Black Lives Matter en la ficción.
El asesinato de George Floyd, un ciudadano de Minneapolis, a manos de unos policías derivó en toda una serie de protestas que se extendieron a nivel mundial, aunque las más importantes fueron las de Estados Unidos. Así pues, la ficción tendrá que resolver la forma para introducir este tema. Tendremos que ver si dedican un episodio especial o alguna conversación entre distintos personajes sobre la discriminación racista y la violencia policial.