En el número 34 de la Avenida de Daroca se encuentra Estudio34, el espacio en el que La Plazuela, o Manuel Hidalgo (“El Indio”) y Luis Abril (“El Nitro”), presentarán en unos minutos su nuevo EP: La Caleta.

El dúo granadino charla tranquilamente, apoyado contra la pared, mientras sus respectivos cigarros se consumen. Abril lleva sus características gafas de pasta negra de las que cuelgan abalorios dorados, polo rojo de Lacoste, pantalones color caqui, calcetines blancos de Nike, mocasines, gorra de Adidas y una buena cantidad de joyas. Hidalgo, por su parte, además de su camisa blanca, luce un cárdigan con el logo de PlayBoy, pantalones de cuadros, calcetines blancos y mocasines a juego con los de su compañero.

Sus estilos a la hora de vestir son, como su música, un compendio de cosas que, una vez orquestadas por ellos mismos, cobran pleno sentido. Mientras esperamos empiezan a sacar el catering. Las once y media de la mañana. Huele a tortilla de patata. 

Dos amigos que querían disfrutar de la música

El interior de Estudio34 es un espacio minimalista, un cubículo de paredes blancas que, bajo la luz de los proyectores, irá transformándose en toda clase de paisajes sacados de los videoclips del grupo. Sentados en cojines blancos en el suelo, contemplamos el espectáculo. El grupo surgió de la iniciativa de dos amigos que querían disfrutar de la música juntos. Al escuchar las palabras de Hidalgo y Abril en los descansos entre canción y canción, da la sensación de que pocas cosas han cambiado: “lo más bonito del proyecto”, aseguran, “es que en todo momento ha sido natural y puro. Se ha formado una amistad verdadera gracias a él”. 

La Rumba de los Bajos

Cuando mencionan esta nueva “amistad verdadera” se refiere a David de Jacoba, el cantaor flamenco con el que, además de Álvaro y Toni Texture, han colaborado para el desarrollo de La Caleta. El EP está compuesto por cinco canciones. Cuatro de ellos ya están fuera; Rumba De Los Bajos lo estará a medianoche. Mientras los videoclips se proyectan a nuestro alrededor, los amigos nos explican que tres de ellos se rodaron en una única semana. Desde su firma con Universal y el éxito de temas como Tangos de Copera o Péiname Juana, que forma parte de su primer disco de estudio Roneo Funk Club, no han tenido tiempo de parar. 

Un proyecto de corazón

Este, aseveran, es el espíritu detrás de La Caleta, “un proyecto de corazón, de pararse después del ritmo frenético de Madrid, de la gira”, y poder volver a su Granada natal. Estas raíces se respiran en todos los aspectos que conforman el nuevo lanzamiento. Fue de Jacoba quién escribió a Abril e Hidalgo, que disfrutaban de su música desde niños. Ahora él escuchaba la del dúo con su hijo. En una playa cercana a la verdadera Caleta quedaron para comer y hablar de música; fue, dicen, “un verdadero momento de hermanamiento”. 

No solo eso, sino que el cantaor, junto a su familia, les abrió las puertas de su casa para la filmación de uno de sus videoclips. En otro recurrieron a cuatro señoras mayores, amigas de toda la vida. Para un tercero, acudieron a Jorge Rico como director para plasmar la Costa de Granada de su infancia, y no la del turismo y los veranos en la playa. En la portada del EP se aprecia un hermoso diseño de la hermana de Abril. Todo ello, en suma, es un cántico a la hermandad y el lugar de origen, a Granada.

La Costa, la familiaridad y un cúmulo de todo

El primer single, explican, está dedicado a la Costa. La segunda bulería, a la familiaridad que han construído. El tercero es un “cúmulo”, como ellos lo llaman, de todo. Sentada en el suelo, con los hombres frente a mí, la música brotando de todas las esquinas del cubículo que conforma Estudio34, y las imágenes de los videoclips como una sucesión de colores en sus cuatro paredes –y aunque el catering aún aguarde en el exterior–  una se siente inmersa en el mundo que con tanto empeño han querido crear. 

El 23 es día de barbacoa

“Muchos no querrán entenderlo”, concluyen en referencia a La Caleta, “sobre todo el mundo del flamenco, pero lo hemos hecho con todo el amor del mundo. Lo dijimos en la última semana de grabación en Salobreña: lo que pase ahora da igual por la amistad y el recuerdo. El 23 de diciembre ya es día de barbacoa para nosotros”.