Entrevistamos al fotógrafo Steven Bernhard y analizamos con él la figura de Foto Fija en el videoclip de La Tirita, el éxito de la unión de Belén Aguilera y Lola Índigo, que ha sido uno de sus últimos trabajos.
En el apartado de música de El Foco, así como en la vida en general, solemos dar más importancia a los artistas, que a todo lo que está detrás del éstos, y es que son muchísimas personas las que consiguen que la carrera de un artista prospere, así como que las canciones y los videoclips que las acompañan salgan adelante.
Por eso, desde El Foco queremos enseñaros la cara B, esta vez, de un proyecto tan exitoso como es La Tirita, la colaboración de Belén Aguilera y Lola Índigo que ya alcanza 6,1 millones de visualizaciones en Youtube.
Para ello, hemos tenido la suerte de entrevistar a Steven Bernhard, para que nos explique la figura de Foto Fija y en qué ha consistido su trabajo en el rodaje del videoclip de esta canción.
La figura de Foto Fija
Quizá no conoces a qué se dedica un Foto Fija. En una pieza audiovisual, es la persona encargada de tomar las fotos de los momentos más sobresalientes del rodaje y que luego sirven para su promoción. Esta persona, tiene la difícil tarea de documentar, a través de su objetivo, y sin estorbar en el rodaje, los momentos más precisos para tener material para making of, promoción y hasta el poster que acompaña a la pieza.
Debe además estar en comunicación con el equipo de Dirección (especialmente de Dirección de Fotografía) para coincidir en el formato visual final.
Steven Bernhard
Steven está consiguiendo hacerse un nombre propio en el panorama musical gracias a su estilo propio de capturar momentos mágicos a través de su objetivo. Empezó su carrera a los 17 años, trabajando entre París y Zurich, vivió en Nueva York, y volvió a Madrid para estudiar fotografía de moda: «Como adolescente, descubrí que podía crear arte a través de las fotografías», afirma en la biografía de su web.
Como fotógrafo de moda ha trabajado para GQ, NEO2, y empezó en el mundo de la música hace relativamente poco como fotógrafo para proyectos de artistas de Warner Music o Must Producciones.
En el caso de La Tirita, Steven no iba a participar en un principio en este proyecto, pero por casualidades del destino, la productora encargada del videoclip se quedó sin la figura de Foto Fija, y Belén Aguilera, amiga suya, no dudó en proponérselo: «Para mí ha sido un gustazo», confesaba. «Belén es muy autoritaria sobre su trabajo y sabe muy bien lo que quiere reflejar y el por qué y es un gustazo trabajar con ella por eso. Es muy fiel a sí misma y tiene un porqué siempre».
Una vez llegáis al primer día de rodaje del videoclip, ¿Cómo te organizas? ¿Cómo te preparas?
El rodaje ya tenía un planning cerrado por la productora, que es Vampire Films, que es una productora increíble, tenían todo el concepto bastante preparado, hablé con ellos, me explicaron un poco el plan de rodaje y yo simplemente me adapté a lo que ellos estaban haciendo y fotografiaba lo que estaba pasando. Al fin y al cabo, no tengo ni voz ni voto, así que me adaptaba a la situación.
Fue un día de rodaje completo y un par de días de antelación para revisar cosas y demás, pero el rodaje fue un día y fue increíble, fue una experiencia más allá del trabajo porque Belén y Lola son amigas, todo estaba muy bien organizado y todos tenían tan claro lo que querían, el ambiente era maravilloso. El equipo de Vampire Films son gente increíble, así que fue súper fácil.
¿Había ciertos momentos, aunque fuera un par de minutos, en los que tuvieras libertad en el set para aprovechar y hacer fotos?
El rodaje estaba muy cerrado de tiempo, pero como había muchas escenas en las que Belén por ejemplo estaba rodando, o Lola estaba rodando sola, yo podía cogerlas por separado, irnos a otro lado y disparar, y sí que es verdad que durante el rodaje, mientras ellos rodaban yo me podía meter un poquito en medio y sin molestar mucho disparaba y es lo que ha salido.
¿Cuál dirías que es la clave para capturar esas buenas instantáneas durante el rodaje?
Lo primero, estar muy atento, que es algo súper importante, y entender lo que está pasando, qué se está grabando y si es importante o no. Hay que valorar si el momento que estás fotografiando refleja algo importante del videoclip, o te puede proporcionar algo, y no molestar ni perder el tiempo, que es lo más complicado en un rodaje así, porque hay muy poco tiempo y muchísimas cosas que hacer.
¿Alguna anécdota que puedas contar del rodaje?
El mejor momento del rodaje fue el momento de la piscina a las diez de la noche. Ya habíamos terminado de rodar todo y claro, estábamos en Ibiza pero hacía muchísimo frío y las dos (Belén y Lola) se tuvieron que lanzar a la piscina. El primer salto fue muy divertido porque, al fin y al cabo, tienes que estar en silencio y ellas se estaban muriendo de frío, pero lo más divertido fue el segundo salto de Belén, porque tenía que saltar dos veces por tema de historia del videoclip, el segundo fue mítico y ya de ahí a la ducha y cervezas y celebración de fin de rodaje.
Para este proyecto has trabajado con Luis Valverde en el diseño de la portada, ¿Qué papel juegas tú en el hecho de decir de portada? ¿Cómo es este proceso?
Yo hago fotos durante el rodaje por lo que es aleatorio, pero sí que es verdad que teníamos una idea clara de lo que querían en portada Belén y Lola, aunque no teníamos un shooting previsto para la portada. Mientras se hacía el rodaje íbamos haciendo fotos, y luego la idea era ver el resultado final y de ahí sacar un poco lo que sucediera. Belén tenía muy claro que quería una especie de montaje, quería doble exposición, quería mucha información sobre lo que pasaba en el videoclip porque había una historia muy importante aparte de lo visual y quería que reflejara mucho lo que pasa en el videoclip. Tenía muy claro que ella quería mucho contenido, que tuviera mucha información.
¿Tienes tú la decisión de escoger qué fotos van a ser publicadas? ¿En ese caso, cómo las elijes?
Hicimos una selección bastante grande. Evidentemente, Belén y Lola tienen que seleccionar de ahí ya por tema de gustos y demás. Después lo enviamos a Must Producciones, a la sección de Prensa, para que organicen todo lo que se va a enviar a Spotify y a la prensa, esas son las más importantes porque son las que más rápido se necesitan. A partir de ahí, organizamos las fotos de portada con una selección previa de ellas, y luego ya con el diseñador y con la idea clara de lo que se necesita acoplamos las fotos que nos venían mejor con la escena. Entonces está dividido como en tres partes: todo lo que es promo de Prensa, la Portada y luego Redes Sociales.
La Tirita es una canción que Belén Aguilera tenía guardada y que ha dado bastantes vueltas hasta acabar siendo el temazo que todos conocemos:
«Belén tiene esas ganas de crear nuevos sonidos y mejorar como cantante. Belén ha venido con algo que es nuevo musicalmente para la industria. Es un sonido muy distinto en comparación al que tiene acostumbrado a sus fans».
Lo de hacer la colaboración con Lola Índigo es algo que surgió de una manera bastante espontánea, según nos cuenta Steven, y cuando surgió ese compromiso, Belén ya sabía que tenía que ser con ella sí o sí. La amistad entre las dos artistas es notoria, y la complicidad entre ellas es muy importante. Es algo que se puede destacar del rodaje de este videoclip. Steven es amigo de las dos, y ha tenido fácil el reflejar la relación entre las artistas, ya que contaba con la ventaja de conocerlas, lo que ha hecho que además haya una confianza especial durante el rodaje.
¿Cuál dirías que ha sido la clave del éxito de este tema?
La clave principal es la historia de ficción y lo que han creado las dos: Ese mundo ficticio que Belén lleva mucho tiempo trabajando y que al juntarlo con Lola Índigo ha sido luego la bomba. Es un sonido también muy distinto. Visualmente, tanto el hype que se ha creado en Redes Sociales como la promo visual, ha sido algo innovador también, entonces, yo creo que a la gente por un lado o por otro, le ha llamado mucho la atención. Y luego pues, evidentemente, son gustos, pero, yo creo que visualmente todo el trabajo de Marketing ha sido muy favorecedor hacia ella.
Cada fotógrafo tiene su forma de editar. En este aspecto, ¿sí que te has amoldado más a lo que han pedido?
La verdad es que es algo que a mí me cuesta, tengo un estilo bastante marcado y me gusta tener un poco de libertad, pero tanto como Belén y Lola como los de Vampire Films y la agencia me dieron carta libre para hacer lo que quisiera, así que, yo les hacía unas propuestas al principio, les iba gustando, a veces había alguna modificación, pero en general estaban contentos y tenía carta blanca sobre la edición. Todo siempre enfocado al videoclip.
A Steven Bernhard le gusta el estilo analógico, tiene una mirada tras el objetivo muy diferente, y su parte artística pesa más que lo comercial, lo que hace que el resultado de sus disparos sea excepcional y único. Por suerte, cada vez más artistas y productoras apuestan por su trabajo, consiguiendo una simbiosis entre su visión artística y las necesidades del artista. Esperamos poder seguir su trabajo por mucho tiempo.