La serie británica, que se estrenó en enero de 2013, basada en el libro My Fat, Mad Teenage Diary escrito por Rae Earl, explora varios temas sociales muy importantes que se pueden sufrir en la adolescencia.
La protagonista, Rae (Sharon Rooney), de 16 años, al principio de la serie nos explica que ser adolescente no es fácil, y más si no cumples los cánones sociales que están establecidos como “normales”. Rae, además, es una chica con sobrepeso que tiene una serie de problemas de autoestima y que acaba de salir de un hospital psiquiátrico en el cual llevaba varios meses ingresada tras un intento de suicidio. Lo único que quiere es rehacer su vida de la manera más normal posible, con su nuevo grupo de amigos. La serie, ambientada en los años 90, se desarrolla a través de varias dosis de humor, realismo y empatía, donde trata diversos sociales importantes que, actualmente, se pueden ver.
Trastornos alimentarios y bullying
La historia se cuenta en primera persona y, por este motivo, podemos sentir la rabia de Rae, su vergüenza, su alegría o su ansiedad en todo momento. En este caso podemos sentir como la protagonista se odia a si misma por su aspecto físico. Durante el transcurso de la serie se ve claramente sus trastornos con la comida, como los atracones. Por el contrario, su amiga del hospital, Tix (Sophie Wright), padece de anorexia nerviosa.
La protagonista sufrió y sufre bullying en el instituto por su aspecto físico y por tener sobrepeso. Este aspecto hace que sea una persona insegura y que tenga problemas de autoestima y, por lo tanto, va a terapia para disminuirlos lo máximo posible. Además, esta inseguridad hace que tenga dudas con Finn (Nico Mirallegro), ya que aunque él le diga muchas veces que está enamorado de ella, Rae no deja de compararse con el físico de otras chicas.
Durante la serie vemos a Rae intentando readaptarse al mundo exterior después de su ingreso en el hospital psiquiátrico y, por este motivo, va a unas sesiones con su terapeuta Kester (Ian Hart), donde le cuenta sus problemas, le ayuda a superar su inseguridad, mejorar sus problemas de autoestima y sobrellevar sus nuevas amistades después de su ingreso.
La serie normaliza ir psicólogo y ese es uno de los mensajes que la serie quiere resaltar. No hace falta que te haya pasado algo parecido a lo de Rae para ir al psicólogo, ya que te puede ayudar muchísimo para sobrellevar el día a día.
Abusos sexuales, aborto y sororidad
Chloe (Jodie Comer), la mejor amiga de Rae, se queda embarazada y decide abortar. Rae, como mejor amiga, la apoya en todo momento en su dura decisión, se queda para cuidarla y no dejarla sola en el proceso. Además, Chloe es una chica muy atractiva y de quien los hombres se aprovechan seguidamente, incluso siendo ella menor de edad.
Problemas familiares
Des del principio de la serie, vemos la relación tan complicada que tiene Rae con su madre (Claire Rushbrook), ya que es uno de los personajes más influyentes en su vida. Además, su madre se enamora de un inmigrante turco ilegal, Karim (Bamshad Abedi-Amin), el cual se instala en su casa. Rae, al principio, tiene muchos prejuicios respecto a él pero luego descubre en Karim la figura paterna que nunca tuvo.
LGTBI+ y sexualidad
En este caso tenemos a Archie (Dan Cohen), un amigo de Rae que sale del armario como homosexual pero que, por miedo al qué dirán, se reprime y aparenta ser otra persona. Hay que tener en cuenta que la serie se ambienta en los años 90, por lo que eran otros tiempos.
Además, la sexualidad en adolescentes la trata genial. Se adecua a la edad de Rae mostrando todos los prejuicios, la idealización del tema, y cómo esto puede crear ansiedad en las chicas. Cuando Finn le confiesa a Rae lo que siente con ella, todas esas inseguridades afloran en ella (ya que piensa que su cuerpo no entra en lo que es «normativo»), hasta que por fin se deja llevar por la sus sentimientos hacia él.
Aceptación personal
Hacia el final de la serie, vemos a una Rae totalmente renovada. Dentro de una sociedad de consumo dónde la imagen de la mujer es cuestionada constantemente es con lo que Rae lucha hasta el final.
Aunque hayan pasado muchos años del estreno de My Mad Fat Diary, es una serie que no dejará indiferente a nadie. En tres temporadas, nos exploran de manera realista todos estos temas que pueden sufrir actualmente muchísimas personas y que se tienen que erradicar. MMFD es una ficción que ha estado infravalorada y que recomendamos al 100%. Actualmente, se puede ver a través de YouTube, ¿a qué esperas?