Mask Singer vuelve a sorprender en su segunda gala con un nivel de enmascarados impresionante y una revelación con mucho glamour.

Tras el primer programa donde La Toya Jackson fue la concursante desenmascarada, el público esperaba una bajada en la categoría de famosos. Sin embargo, esta gala continúa con el buen sabor de boca que dejó la primera.

Medusa, de habla inglesa; Rana, galante y divertida, y Dragona, con un rugido fiero, fueron los máscaras que se enfrentaron en primer lugar. Posteriormente, Huevo, dulce y simpática, y Gatita, con mucha clase, disputaron el segundo duelo.

Dragona y Gatita tuvieron que luchar en el duelo final, en el que Dragona venció haciendo que Gatita se tuviera que desenmascarar.

Otra sorpresa más

Gatita es una persona con distintos orígenes a la que le gusta jugar con sus cachorros. Además, se define como alguien pasional a pesar de que otros gatos maúllan a sus espaldas.

Para Javier Ambrossi, la identidad de Gatita estaba clara desde el principio. El resto de investigadores se quedaron asombrados con su teoría y decidieron seguirlo aunque con muchísimas dudas.

Finalmente, la identidad de Gatita era Isabel Preysler, la apuesta de los investigadores con Ambrossi a la cabeza.

Las máscara virtual

Además de las máscaras televisivas, no nos podemos olvidar de Dama Centella, que ya ha dado nuevas pistas virtualmente. Asimismo, hemos podido oír su voz natural porque se ha estrenado cantando.

El público parece tener claro por unanimidad quién es esta máscara. Para la gente, Dama Centella es Tamara Gorro. Sin embargo, de momento sólo son teorías que serán comprobadas en la final de Mask Singer.

La revolución

Si algo tenemos claro con solo dos programas es que esta segunda edición de Mask Singer viene fuerte. Tras el éxito de la primera temporada, la cadena ha apostado en grande por el concurso, y así se ve en el nivel de los enmascarados.

Artistas internacionales o personas importantes de nuestro país que no esperarías encontrar en un concurso como este habitan en las máscaras. El público lo ha reconocido, el casting de este año pinta muy bien y la dificultad de las identidades también.

A estas alturas, los investigadores caseros tendrían algunas máscaras claras, pero en esta segunda edición todo el mundo está perdido, dándole un toque de intriga mayor al concurso.

Líder de la noche

Mask Singer continúa siendo el programa preferido los lunes por la noche con 1,9 millones de espectadores y una cuota de 15’5%. Todo ello a pesar de que la audiencia reclama a la cadena un cambio de horario.

El programa, definido dentro de la categoría familiar, empieza a las 22:45, siendo una hora tardía para los más pequeños de la casa. El público pide que el programa empiece antes o que lo cambien al fin de semana para comodidad de la gente y conseguir mayor audiencia.